Desde las obvias a las increíbles, pasando por las novedosas; estas son las tendencias laborales que veremos en 2024.
De acuerdo con Deel, una plataforma de recursos humanos con operaciones globales, hay 6 tendencias principales en el mundo laboral que podrían tomar fuerza durante 2024.
Modo avión
Es bien sabido que descansar 10 o 15 minutos cada 2-3 horas de trabajo es fundamental para despejar la mente y continuar la jornada en plenas facultades.
Ese tiempo puede emplearse para salir del entorno laboral un rato, a comer, a tomar un café o a dar un pequeño paseo; al regresar, se experimentrá un cambio positivo al retomar las tareas con otro ánimo y energías renovadas.
Pero al parecer esta práctica podría tomar un significado más amplio; para fomentar un “enfoque profundo”, la empresa Density sugiere que los empleados activen el “modo avión” durante 100 minutos y usen ese tiempo para leer, intercambiar ideas o cualquier otra cosa que los ayude a concentrarse.
Habilidades primero (Enfoque “skills first”)
En un enfoque skills-first, los puestos se evalúan por las competencias que se necesitan para desarrollarlo.
Las habilidades requeridas para un puesto son muy diferentes a las que se necesitarán algunos años después para el mismo, por tal motivo, un enfoque decontratación basado en competencias podría resultar en un proceso de contratación más equitativo.
No importa de donde vengas, siempre y cuando tengas las habilidades necesarias para el puesto. Esto permitirá contratar personas que no tengan un grado académico en los puestos en donde no sea indispensable una formación académica de 4-5 años.
Construir un portafolio de skills es clave para el mundo laboral del futuro, ya que los empleadores desean pruebas de las habilidades que un candidato posee.
Para desarrollar y fortalecer soft skills, la oficina física juega un rol muy importante para ayudar a los empleados a desarrollar habilidades como comunicación, colaboración y empatía.
Funemployment
En vez de sentir la presión y la ansiedad de regresar al mundo laboral, algunas personas están disfrutando de su tiempo libre o tomándose el tiempo para encontrar no sólo su próximo trabajo sino el trabajo adecuado.
La palabra “Funemployed” es la unión de “fun” (diversión) y “unemployed” (desempleado), lo que significa “desempleado y divertido de serlo”.
El perfil del “funemployed” es el del joven, de entre veintitantos y treintaitantos años, soltero, sin grandes cargas económicas, que inicialmente vive de la indemnización que recibió cuando le echaron de su último trabajo, y del apoyo de sus padres. Y que no acepta ningún trabajo que no le genere ingresos muy superiores a los que obtiene del subsidio de desempleo (en los países donde existe).
Las personas con empleo frecuentemente señalan que encontrar un nuevo trabajo puede ser un proceso largo y estresante, especialmente durante tiempos económicos difíciles, por tal motivo, al quedar desempleados, optan por aprovechar la oportunidad de hacer cosas que normalmente no podrían hacer si tuvieran un empleo.
Por ejemplo, pueden participar en actividades de ocio como viajar, hacer ejercicio, socializar y simplemente pasar un buen rato. Algunos pueden decidir realizar un trabajo significativo no remunerado, como ser voluntario en su comunidad.
Sin embargo, esto puede generar dificultades financieras si una persona no tiene otra fuente de ingresos, y podría ser difícil lograrlo si tiene dependientes y deudas. Además, los períodos de desempleo prolongado pueden ser difíciles de explicar a los futuros empleadores que quieran ver un historial laboral estable.
La semana de cinco días en oficina murió
A pesar de la presión que hubo para que los trabajadores regresen a las oficinas, parte del trabajo realizado desde casa llegó para quedarse y hay datos consistentes que muestran la necesidad de revisar las políticas de vuelta a la oficina.
Es importante incluir, dentro de las empresas, los procesos de innovación, observación y adaptación para que un modelo tanto híbrido como remoto sea exitoso.
Debido a algunas condiciones de vida en las ciudades de América Latina luego de la pandemia, se evidencia que:
79% de los trabajadores quiere trabajar desde la casa con mayor frecuencia.
63% de los profesionales considera ahora que su trabajo es factible fuera de la oficina.
Los encuestados indicaron que el mayor beneficio del trabajo a distancia es el fin de los desplazamientos diarios.
60% considera que, debido a esto, el equilibrio entre el trabajo y la vida personal ha mejorado.
Otro aspecto es que el 43% de los profesionales afirma que se ha sentido cómodo con la tecnología en el último año.
El reto es crear un ambiente y una cultura en la que los empleados que necesiten o prefieran trabajar desde casa puedan hacerlo, mientras que los empleados que quieran volver a la oficina se sientan confiados de que estarán seguros y productivos en ese espacio.
Rage Applying
El “rage applying” es una tendencia en la que los trabajadores, frustrados con su empleo actual, comienzan a enviar solicitudes de empleo de forma desesperada, sin importar si están calificados para el puesto.
Este comportamiento se asocia con el síndrome de burnout y el estrés laboral, y ha cobrado importancia recientemente. Se ha observado que los trabajadores recurren a esta práctica para buscar un nuevo empleo, incluso si no cumplen con todos los requisitos del puesto.
Esto puede perjudicar tanto a los empleados como a las empresas, ya que los candidatos no cumplen con todos los requisitos y los departamentos de recursos humanos reciben un mayor número de solicitudes.
Para evitar esta situación, los candidatos deben ser reflexivos y analizar las oportunidades laborales antes de postularse para un trabajo, y las empresas deben proporcionar información clara sobre el puesto ofertado y preocuparse por aspectos que importan al trabajador, como la salud mental y la conciliación de la vida laboral con la personal.
Rage Applying
Las Queenagers son mujeres de mediana edad que empezaron sus carreras en los años 80, cuando se identificó por primera vez el “techo de cristal”, y romperlo, se convirtió en un objetivo posible, aunque muy difícil de alcanzar para las mujeres ambiciosas en empresas. Ahora, muchas de esas altas ejecutivas están abandonando el mercado laboral, al rechazar empleos insatisfactorios.
La edad de las reinas oscila entre los 45 y 65 años, y suelen tener ingresos relativamente altos y un alto grado de libertad en las decisiones que toman porque han superado la edad de criar a sus hijos, o porque decidieron no tenerlos.
Noon, un sitio web dedicado a atender a este grupo, acuñó el término queenagers y describe al grupo como si estuviera en “la edad de las oportunidades”. A diferencia de sus colegas más jóvenes, que tienen hijos y crían familias. Las queenagers disfrutan de un alto grado de autonomía y gasto. Pero, sobre todo, valoran la libertad.
Las mujeres enfrentan desafíos al compaginar su carrera profesional con la maternidad, en adición, a nivel global, las mujeres continúan ganando en promedio alrededor del 80% de lo que ganan los hombres, y el aumento del número de mujeres en la población activa se ha estancado.
Estudios muestran que las responsabilidades de cuidado de los hijos contribuyen a una menor experiencia laboral y a una brecha de ingresos entre hombres y mujeres.
La flexibilidad es 16 veces más importante para las mujeres de 45 a 60 años que el estatus; para muchas, sobre todo las que habían trabajado en empresas durante años y disponían de los recursos financieros para emprender su propio camino, crear su propia empresa o consultoría era visto como una forma de conseguir la flexibilidad y autonomía que ansiaban.
Conclusión
El mundo cambia muy rápido, y el mundo laboral no es la excepción, por lo que las tendencias para el próximo año podrán parecer un tanto extrañas, pero con más de una ya estamos conviviendo y muy probablemente, en un futuro no muy lejano, nuestra sociedad estará totalmente inmersa en un mundo laboral con todas las características descritas en este artículo.