Es una métrica usada para saber cuánto ganó una empresa gracias a sus inversiones.
El ROI es una métrica financiera basada en la relación entre el dinero ganado y el dinero invertido en una acción concreta. Significa "Return on Investment" o "Retorno de la Inversión". Es una de las principales métricas que se utilizan en marketing para calcular la rentabilidad de algunas inversiones, como una campaña o acción concreta.
¿Qué es el ROI (retorno de la inversión)?
A través de este indicador, es posible saber cuánto dinero está ganando (o perdiendo) la empresa con cada inversión realizada.
Incluye todo lo que se hace con el objetivo de obtener ganancias, como acciones de marketing, capacitación en ventas, adquisición de herramientas de administración, nuevas estrategias de retención de clientes, entre otros.
Así se puede saber qué inversiones valen la pena, y cómo optimizar aquellas que ya están funcionando, para tener un mejor rendimiento.
Importancia
Ayuda a responder preguntas sobre tu negocio, como estas:
¿Cuáles son las mayores fuentes de ganancias de la compañía?
¿Cuáles son los canales de comunicación más efectivos?
¿El rendimiento de las iniciativas de marketing es el esperado?
¿El proceso de ventas ha demostrado ser eficiente?
¿El servicio al cliente contribuye a la lealtad del cliente o se está quedando corto?
Diferencias entre ROI y TIR
El ROI hace referencia al retorno de inversión que percibe una organización. La TIR, por su parte, se define como la tasa interna de retorno y consiste en una medida porcentual que refleja la rentabilidad de una inversión.
Su principal diferencia consiste en que el ROI es un cálculo de las ganancias obtenidas tras una operación comercial, mientras que la TIR es una proyección futura del éxito de una inversión.
Diferencias entre ROI y ROAS
Por otro lado, el ROAS es el cálculo del retorno a la inversión publicitaria y consiste en la obtención de un porcentaje que permite determinar la relación existente entre el gasto en campañas y estrategias de marketing y publicidad frente a las ganancias obtenidas por la venta efectiva de los productos o servicios publicitados.
La principal diferencia del ROAS frente al ROI es que el primero no tiene en cuenta las ganancias, sino los ingresos brutos.
¿Cómo calcular el ROI?
La forma más sencilla de calcular el ROI es siguiendo esta fórmula:
ROI = [(ingresos - costos) / costos] x 100
La puedes usar para analizar el negocio en su conjunto, o para evaluar un proyecto o área, individualmente. El resultado es un porcentaje.
Los ingresos son todo lo que la empresa recauda de las ventas. Al calcular el ROI para un área o campaña específica, recuerda usar solo la cantidad recaudada por el segmento elegido.
Los costos son todos aquellos gastos necesarios para hacer viable la inversión.
Con el ROI es posible analizar:
¿Qué se hizo (o no se hizo) que pudo haber influido en el resultado?
¿Qué tienen las altas participaciones de ROI que se pueden replicar en los demás?
¿Las campañas tienen un rendimiento similar al de mis competidores?
¿Tu empresa tiene mejores resultados que las otras del sector?
5 ventajas de saber trabajar en función del ROI
Recortar gastos innecesarios.- Al mostrar qué inversiones vale la pena mantener, las tácticas que deben abandonarse también se muestran automáticamente.
Aumento de ganancias.- Al usar el dinero disponible de la mejor manera posible, el resultado solo puede ser uno: aumento de ganancias.
Resultados duraderos.- El seguimiento del ROI es un proceso continuo, nunca se puede dejar de lado. Dado que el objetivo final es ser consistentemente rentable, una vez que se establezca el hábito de hacer este cálculo, puedes esperar resultados duraderos.
Aumento de la autoestima del equipo.- A todos nos gusta trabajar en una empresa exitosa, en la que los proyectos creados funcionan bien y los objetivos establecidos siempre se logran.
Fortalece la cultura
Evaluar bien este indicador y trabajar basándonos en él ayuda a todos a tener una mirada analítica en el trabajo; concentrarse en los resultados, no solo en los logros personales; ser imparcial al tomar decisiones; comprender mejor lo que funciona para la empresa.
Sin duda, estos son valores que vale la pena tener como parte de la cultura organizacional.
Limitaciones de ROI
El ROI no tiene en cuenta la duración de la inversión. Si hablamos de un ROI del 5% por día, es un resultado excelente. Pero si hablamos de inversión a largo plazo, por ejemplo, 1 año, sucede todo lo contrario.
El ROI no tiene en cuenta las fluctuaciones de valor debido a la inflación. Un rendimiento del 5% anual se disolvería por el aumento de la inflación u otros problemas bancarios (impuestos, aranceles, entre otros.).
El ROI para medir una inversión a mediano o largo plazo, puede arrojar un resultado positivo, pero engañoso. Dependiendo de la inversión, ese número puede haber sido influido por otros factores enmascarando resultados negativos de ciertos períodos.
Recomendaciones
1. Olvídate de las métricas de vanidad
Por ejemplo, un aumento en el tráfico a tu sitio puede indicar que la estrategia adoptada para ese canal está funcionando. Pero lo que importa son las conversiones, leads generados, clientes conquistados, entre otros.
2. Adaptarse rápidamente
Después de invertir tiempo, energía, dedicación y trabajo en equipo, además de dinero, para poner en marcha una campaña, puede ser difícil cambiar de dirección. Pero, si los resultados no contribuyen al desarrollo del negocio, no dudes en cambiar los puntos deficientes.
3. Mantente atento al mercado
Observa de cerca la evolución de los gustos, deseos y necesidades de tu audiencia. Los avances tecnológicos y lo que están haciendo los competidores. Continúa probando la relevancia de las acciones actuales y decide qué estrategias se adoptarán en el futuro.
4. No escondas información de tu equipo
Es vital compartir los objetivos y las observaciones con todos en la empresa. Si lo haces, encontrarás poca o ninguna resistencia cuando necesites tomar una nueva dirección.
5. Sé paciente al evaluar inversiones
Las acciones efectivas toman algún tiempo para entregar los resultados esperados. Al calcular tu ROI, piensa en un tiempo razonable para que la inversión comience a tener retorno. De lo contrario, puedes desperdiciar una estrategia que funcionaría haciendo cambios con anticipación.
Está claro que el ROI tiene un profundo impacto en la salud de una empresa, tanto en los resultados inmediatos de marketing y ventas como en la capacidad de seguir siendo relevante en el mercado.