La oniomanía es una conducta compulsiva de adquirir objetos desproporcionadamente y más allá de nuestras posibilidades económicas, que brinda satisfacción pero también malestar.
La oniomanía es una conducta compulsiva de adquirir objetos desproporcionadamente y más allá de nuestras posibilidades económicas, que brinda satisfacción pero también malestar.
Se presenta como una necesidad irresistible y repetitiva de comprar, afectando a una pequeña parte de la población general.
Esta adicción puede estar relacionada con un desequilibrio de neurotransmisores en el cerebro, como la dopamina y la serotonina. Para tratarla, se sugiere combinar tratamiento psiquiátrico con terapia cognitivo-conductual, para reequilibrar las sustancias cerebrales y desarrollar estrategias que controlen el comportamiento impulsivo.
La adicción a comprar se convierte en un problema cuando la persona pierde el control de sus actos y la compra deja de ser algo agradable o necesario, afectando tanto a quien la padece como a su entorno.
Existen investigaciones que concluyen que las mujeres adoptan una actitud más compulsiva en el momento de realizar compras innecesarias, y sienten emociones más intensas en comparación a los hombres.
Las mujeres tienden a realizar compras compulsivas relacionadas con moda, ropa, zapatos y complementos y los hombres que padecen esta necesidad son propensos a gastar en aparatos electrónicos y nuevas tecnologías.
En nuestra sociedad, el consumo excesivo y la búsqueda constante de objetos materiales están presentes en nuestro día a día. La exposición constante a una amplia gama de productos en el mercado puede generar en los consumidores un deseo insaciable de adquirirlos, a pesar de no contar con los recursos económicos suficientes.
Este deseo puede ocasionar ansiedad, sentimientos de fracaso e impactar negativamente en nuestra salud mental. Además, puede alimentar la necesidad de poseer objetos y accesorios de moda para destacar entre los demás.
¿Cuál es el perfil psicológico de un comprador compulsivo?
Enfrentamos un problema de salud mental, no de adicción.
En la actualidad, esta conducta no se clasifica como un trastorno reconocido, lo que resulta en que aquellos que la padecen sean etiquetados como tener un “Trastorno del control de impulsos no especificado”.
En general, las personas que experimentan oniomanía también cumplen los criterios para otros trastornos, como aquellos relacionados con el estado de ánimo, el uso de sustancias, la ansiedad, e incluso se ha observado una conexión significativa con trastornos alimenticios.
Investigaciones previas sobre este tema han revelado una posible influencia genética; McElroy y su equipo identificaron que de 18 individuos con compras compulsivas, 17 tenían algún familiar con trastornos del estado de ánimo, 11 con problemas de abuso de sustancias, 3 con compras compulsivas y otros 3 con trastornos de ansiedad.
Causas de la oniomanía
Se pueden identificar dos causas potenciales que llevan a desarrollar una conducta compulsiva. Por un lado, está el hecho de que la persona encuentra placer al realizar una actividad repetitiva, lo que eventualmente se convierte en un hábito compulsivo.
Por otro lado, la conducta compulsiva puede surgir como resultado de la incapacidad de la persona para hacer frente a sus problemas personales, por lo que recurre a compras excesivas como una forma de escape emocional.
Las cuatro fases de la compra compulsiva
· Anticipación. Surgen pensamientos, preocupaciones e impulsos con relación a un producto en concreto o sobre el hábito de comprar.
· Preparación. Comienza a tomar decisiones sobre dónde comprará el producto, cómo realizará el pago, cómo llegará al comercio o la vía mediante la cual se adquirirá el producto tienda física, online… En algunos casos, indaga información extra sobre el artículo.
· Compra. Lo viven como una experiencia muy excitante y placentera. Para las personas con oniomanía en el momento de realizar la compra es un momento esperado y les hace sentir fenomenal.
· Gasto y decepción. Una vez hecha la compra y gastado el dinero surge una sensación de desilusión con uno mismo junto con sentimientos de culpabilidad, rencor, ira y el firme propósito de no repetir la conducta.
¿Por qué se compra de manera compulsiva?
Entre las razones más comunes y más impactantes para esta conducta compulsiva, se destacan:
- Sentir un profundo vacío emocional o soledad. Al realizar la compra, se cree que se puede llenar ese vacío interno, pero en realidad, la sensación de vacío se agrava cada vez más, creando un ciclo difícil de romper.
- La emoción que se experimenta al adquirir un nuevo artículo. Las emociones positivas durante la compra pueden impulsar a repetir la conducta.
- Durante las rebajas, el temor a perder una buena oportunidad de compra puede motivar al comprador a actuar rápidamente.
¿Qué ocurre después de las compras?
El adicto a las compras experimenta intensas emociones de ansiedad y remordimiento que pueden desencadenar en síntomas de depresión como resultado de sus hábitos de gasto descontrolados.
Sin embargo, estos efectos no se deben únicamente a las compras irracionales, ya que la mayoría de las personas con este comportamiento también muestran rasgos compulsivos en diferentes áreas de sus vidas.
Para aliviar su angustia y depresión, la persona puede intentar calmar sus emociones mediante nuevas compras, lo que alimenta un ciclo vicioso.
Admitir que se tiene una adicción supone un desafío para nuestras creencias, lo que puede explicarse a través de la teoría de la disonancia cognitiva: cuanto más compramos, más necesitamos justificar ese hábito comprando más.
En consecuencia, los adictos a las compras tienen pocas opciones y la situación empeora a medida que la falta de dinero se hace más evidente, convirtiendo la oniomanía en un problema que afecta diversos aspectos de sus vidas.
Consejos para evitar la oniomanía
Intenta evitar las compras de última hora
Ir a comprar siempre en transporte público
Anotar en una lista solamente lo que necesitas
Evitar comprar en momentos de desánimo, euforia, tristeza, depresión o ansiedad.
Haz un presupuesto
Investigación: Si hay algo que desees mucho, antes de comprarlo, busca su precio real e identifica si hay una oferta que sea más conveniente.
Compara precios
Evita compras de último minuto
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomienda alejarte de las tarjetas de crédito si consideras que eres un comprador compulsivo.
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