Riesgos laborales y psicosociales de ser influencer

Con nuevas profesiones surgen nuevos riesgos laborales, y en el caso de los influencers, a pesar de mostrar una vida profesional perfecta, enfrentan riesgos laborales y psicosociales derivados de su trabajo.

El ámbito del marketing de influencia está experimentando un crecimiento constante, con cada vez más empresas que lo utilizan para promocionar sus productos y servicios a través de las redes sociales y otros sitios web.

En un mundo donde las opiniones están fuertemente divididas, la labor de ser influencer puede resultar compleja, especialmente al enfrentarse a las intensas críticas.

Con nuevas profesiones surgen también nuevos riesgos laborales, y en el caso de los influencers, a pesar de mostrar una vida profesional aparentemente perfecta, a menudo enfrentan riesgos laborales y psicosociales derivados de su trabajo.

Ser influencer es una profesión en boga, y los países con mayor cantidad de influencers incluyen a Estados Unidos, Brasil, Reino Unido, India, Alemania, Francia y España, según datos de HypeAuditor-Statista.

De acuerdo con una encuesta sociológica realizada a más de 800 personas de entre 18 y 35 años, casi el 40% de los jóvenes aspira a convertirse en influencer. Esta popularidad no es sorprendente, ya que implica beneficios como viajes gratuitos, estancias en hoteles de lujo y la oportunidad de probar productos de forma gratuita, a cambio de crear contenido para promocionar diversas marcas entre sus seguidores.

Sin embargo, la vida de un influencer no es todo glamour, los ciberdelitos, el ciberacoso, la presión, el estrés, la falta de privacidad, los riesgos para la salud mental y la pérdida de credibilidad son algunos de los desafíos a los que se enfrentan.

Cualquier individuo puede ser víctima de un fraude, de un robo de información personal o bancaria a través de internet. Sin embargo, la posibilidad de que esto le ocurra a un influencer se incrementa: la constante interacción con sus seguidores a través de directos o historias en Instagram y otras redes sociales los hace más susceptibles a este tipo de situaciones.

De hecho, es cada vez más común ver en las noticias casos de influencers que han sido afectados por este tipo de delitos.

¿Cuáles son los principales riesgos a los que se enfrentan estos personajes públicos?

Además de la suplantación de identidad, también están expuestos a delitos como el ciberacoso, tanto de índole sexual como personal; hackeos de cuentas y acceso a información personal; robo de dispositivos o cuentas; e incluso extorsión económica.

Estos influencers dependen de su reputación digital para ganarse la vida, por lo que estos peligros pueden poner en peligro su credibilidad y, en consecuencia, su negocio. Para ellos, su marca personal es fundamental: se trata de una profesión que requiere una dedicación constante para construir una identidad sólida y una comunidad fiel.

Sin embargo, el concepto de desconexión digital, que busca limitar el uso de tecnologías de comunicación para garantizar el descanso de los trabajadores, plantea un desafío para los influencers. ¿Tienen ellos derecho a desconectar?

Esta nueva profesión difumina los límites entre el trabajo y la vida personal, ya que los influencers están constantemente generando contenido, buscando destacar y obteniendo la atención de sus seguidores. Esto hace que siempre estén conectados a sus perfiles sociales, respondiendo a la demanda de su audiencia.

La falta de privacidad no es el único desafío al que se enfrentan. La exposición excesiva en las redes sociales, la constante necesidad de validación de sus seguidores (y no seguidores), las críticas y comentarios ofensivos, y la creación de una identidad basada en las demandas de los usuarios son riesgos serios que enfrentan de forma continua.

Esta presión constante a menudo conduce a trastornos de ansiedad, depresión e incluso, en casos extremos, suicidios.

Para prevenir estos riesgos laborales, es fundamental la prevención, al igual que para cualquier trabajador autónomo.

Aunque las leyes de prevención de riesgos laborales están más enfocadas en los trabajadores asalariados, es importante establecer claramente la relación contractual entre el influencer y la empresa en el caso del teletrabajo. Es necesario revisar y replantear las leyes de prevención de riesgos laborales para adaptarla a la realidad de los influencers.

Además de las leyes, tanto los influencers como las empresas que trabajan con ellos (agencias, asociaciones, marcas) pueden implementar recomendaciones para prevenir los riesgos asociados con esta profesión.

Evitar mezclar correos personales, como los bancarios, con las cuentas de redes sociales.

Usar contraseñas fuertes y únicas para cada plataforma, y activar siempre la verificación en dos pasos en las redes sociales.

Establecer un horario y un espacio de trabajo definido para desconectar digitalmente, similar a un empleado tradicional.

Mantener una separación clara entre la vida privada y laboral, no es necesario estar disponible para los seguidores todo el tiempo.

Para las agencias y marcas que contratan influencers, proporcionar toda la información legal necesaria y los términos de contratación pertinentes.

Involucrar al influencer en la marca o agencia, invitándolo a conocer las instalaciones o proporcionándole un espacio para trabajar.

El panorama laboral está evolucionando, lo que requiere cambios en las leyes para adaptarse a las nuevas formas de trabajo surgidas durante la pandemia, así como a las nuevas profesiones como influencers y youtubers que han surgido con el auge de las redes sociales.